En mayo de este año, ingresó a la Cámara de Representantes el proyecto: “Ley integral para el fomento y acceso al cannabis medicinal y terapéutico en Uruguay”, propuesto por el sector Ir del Frente Amplio. Contó con el respaldo de 24 firmas de diputados, al momento del ingreso al Parlamento, y el 11 de setiembre, el proyecto de ley fue aprobado por unanimidad por la Cámara de Representantes.

El día de hoy, 10 de diciembre, saludamos y celebramos que el Senado dio la sanción completa al proyecto y la convirtió en ley.

Junto al proyecto de Fomento de la Investigación Científica en Cannabis, aprobado la semana pasada por el Senado, el proyecto de Acceso al Cananbis Medicinal y Terapéutico impulsa el sector desde una perspectiva de desarrollo e inclusión.

Esta ley busca dar respuesta a las dificultades de implementación detectadas, luego de un largo proceso de diálogo e intercambio que involucró a múltiples las partes: Sindicato Médico del Uruguay y la Sociedad Uruguaya de Endocannabinología; organizaciones de la sociedad civil como los familiares de niños con epilepsia, asociación de padres de niños con autismo, asociación de pacientes de fibromialgia, entre otras; la Academia, la Asociación de Química y Farmacia; los productores de aceites de cannabis medicinal; entre otros actores sociales y del sistema político.

¿Qué plantea esta ley?

Propone un conjunto de medidas complementarias a la normativa ya aprobada sobre regulación del cannabis a través de la Ley 19.172 para mejorar la accesibilidad de los pacientes que, contando con una prescripción médica, opten por un tratamiento en base a cannabis para la mejora de su salud. El proyecto propone aumentar las vías de acceso, creando las Formulaciones Magistrales en base a cannabis, el producto vegetal en base a cannabis y las Asociaciones de Pacientes. Asimismo, faculta al Ministerio de Salud Pública a incluirlo en Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS).

La ley genera un marco regulatorio que promueve la producción de cannabis y sus derivados para uso medicinal, en particular a pequeña y mediana escala, a través de la regulación de los pequeños y medianos productores que hasta hoy se encontraban elaborando sin controles de calidad, ni productos habilitados. Los productores de cannabis medicinal tendrán 60 días luego de (promulgada/reglamentada) la ley para presentarse ante el IRCCA con voluntad de regularse.

Incluye la cadena de valor del cannabis dentro de los instrumentos de promoción y fomento que administra el sistema de transformación productiva e impulsa ámbitos de análisis y propuestas para solucionar las dificultades financieras y de acceso a semillas.

¿Por qué es importante?

Actualmente, son cada vez más las personas que buscan tratamientos con cannabis medicinal pero su acceso sigue siendo restringido; ya sea por el alto costo, o bien por la escasa información existente en el Sistema de Salud.

No obstante, esta ley logrará que los productos artesanales de derivados del cannabis cumplan un estándar de calidad, garantizando la seguridad de la población. También, se promueve el seguimiento médico de estos tratamientos, para lo que se considera importante la formación y actualización de saberes, tanto de médicos/as como de otros profesionales conexos (químicas/os farmacéuticas, cultivadores, etc).

Destacamos el proceso de elaboración de esta ley con los actores antes mencionados, así como la discusión en la bancada del Frente Amplio y con representantes de todos los partidos políticos, que permitió sumar actores a la reflexión y resultó, finalmente, en su aprobación. Uruguay hoy da un paso más en la agenda de derechos y es vanguardia en políticas de drogas que, de a poco, transita hacia la adopción de un paradigma basado en la salud pública y los derechos humanos.

Texto de la Ley